Mientras Luisiana hace acopio de fuerzas para reconstruir tras las históricas inundaciones en todo el estado, Pull-A-Part se complace en informar de que todos los empleados de Baton Rouge, Lafayette y Nueva Orleans se encuentran a salvo. Aunque las ciudades de Baton Rouge y Lafayette sufrieron inundaciones masivas, ambos Pull-A-Part se salvaron de las inundaciones y han reabierto para ayudar a los clientes a volver a la carretera.

"Todo el mundo volvió con una actitud positiva", dijo el gerente de Pull-A-Part de Baton Rouge, Tanner Briggs. "Alrededor del 70% de nuestros empleados se vieron afectados, y todos menos uno han vuelto al trabajo. Nuestros empleados se han recuperado muy bien, y muchos agradecen que Pull-A-Part siga aquí. Personalmente estoy muy orgulloso de la solidez de nuestros empleados".

Pull-A-Part de Baton Rouge se encuentra en Greenwell Springs Road, una de las zonas más inundadas de la ciudad. Aunque Pull-A-Part se salvó y no se inundó en absoluto, las estaciones de policía y bomberos de la calle se inundaron hasta el techo.

"Se les podía ver remando por las calles para salvar a la gente de los tejados", dijo Briggs. "Todos ellos salieron en masa, arriesgándose para salvar a la gente en sus embarcaciones. La presencia policial ha sido realmente poderosa, y da gusto verla".

Cientos de trabajadores de seguridad pública de todo el país han viajado a Luisiana para ayudar en las labores de recuperación. Como siempre, Pull-A-Part ofrece entrada gratuita a los primeros intervinientes y a los miembros del ejército como muestra de nuestro agradecimiento.

"Todos los habitantes de Baton Rouge se unieron para hacerlo posible, desde los guardacostas hasta los particulares que tienen embarcaciones", afirmó Briggs. "Eso se reflejará en nuestra rápida remontada. La gente está volviendo al trabajo".

El día en que Pull-A-Part reabrió sus puertas, varios clientes pasaron a comprar pequeños artículos para volver a poner en marcha sus coches. Para algunos, el viaje a Pull-A-Part fue una forma de empezar a planificar el camino hacia la recuperación.

"Vinieron un par de personas que necesitaban un lugar donde ir que no estuviera bajo el agua, simplemente para comprar", explicó Briggs. "Vinieron a pasear unas horas, a estar entre coches y a hacer sus cosas. Muchos de ellos dependen de nosotros para mantener en marcha sus propios negocios, y estaban encantados".

Pull-A-Part envía sus mejores deseos a nuestros amigos y vecinos afectados por las inundaciones de Luisiana. Los empleados afectados por la tormenta recibieron paquetes de asistencia y ayuda en la programación para contribuir a la recuperación. Próximamente, todas las tiendas servirán un almuerzo a los clientes con la entrada al patio durante el Día de Agradecimiento al Cliente: Baton Rouge acogerá el Día de Agradecimiento al Cliente el 28 de septiembre, y Lafayette el 29 de septiembre.